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Real Expedición Filantrópica de 1804 (Parte II)

Francisco Javier Balmis


Amar y sufrir es a la larga la única forma

de vivir con plenitud y dignidad,

Francisco José Balmis



Hoy nos toca hablar del auténtico héroe de la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna que, como tantos y tantos otros es incomprensiblemente ignorado por nosotros. Parece que los españoles sentimos un enorme pudor al tener que admitir que la historia de la humanidad seria otra de no haber existido España.

A finales del siglo XVIII el virus más mortífero que haya conocida la humanidad, la viruela, asola Europa y el Nuevo Mundo. En Inglaterra, un médico rural, Edward Jenner, observa que las granjeras que padecen una enfermedad leve, llamada vacuna porque la transmiten las vacas, no contraen la viruela.

En 1796, Jenner, inocula a un niño pus de una granjera y, semanas después, inyecta al niño el virus de la viruela, pero no enferma, está inmunizado.

En Europa, donde cada año morían 400.000 personas infectadas, nace la esperanza. En las Indias Occidentales, los indígenas muertos o contagiados se contaban por millones, pero ¿Cómo se puede llevar hasta allí, en buenas condiciones, la vacuna salvadora? Los dos meses de viaje por mar y los rigores del clima tropical dificulta en gran manera su conservación.

Será un hombre de inquebrantable voluntad, el médico español Francisco Javier Balmis, quién encuentre la respuesta que permitirá salvar cientos de vidas desde Las Indias Occidentales hasta las puertas de China.

Edward Jenner expresó su asombro, orgullo y satisfacción sobre el éxito de la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna, dirigida por Francisco Javier de Balmis, al ver cómo su descubrimiento se estaba utilizando para salvar vidas a nivel global.

 ¿Pero quién fue aquel doctor Balmis cuya figura permanece hoy injustamente oscurecida? 

Francisco Javier nace en Alicante el 2 de diciembre de mil setecientos cincuenta y tres, en la que se llamaba plaza de la fruta, detrás del Ayuntamiento. Es hijo y nieto de cirujanos barberos.  Casó con Josefina Mataseca y no tendrán hijos, aunque su vida siempre estará asociada a los niños.

El expediente académico y profesional de Balmis nos muestra a un hombre entregado a la ciencia. A los 17 años ingresa como practicante de cirujano en el Hospital Militar de Alicante y a los 25 obtiene el título de Cirugía y Algebra por la Universidad de Valencia. Con 26 años ingresa en el Ejercito donde pronto es ascendido a cirujano. A los 33 años es nombrado cirujano mayor del Hospital Militar Amor de Dios en Méjico. A los 42 años es cirujano de cámara de Carlos IV y practica en Madrid las técnicas de vacunación de Jenner.

Conozcamos ahora a Balmes como hombre de acción. Con 22 años marcha voluntario a la campaña de Argel que le permitió adquirir experiencia en medicina militar tanto sobre condiciones sanitarias en los campos de batalla como en gestionar epidemias en situaciones de guerra.

En 1781, a los 28 años viaja a América, incorporado al regimiento Zamora en un convoy de ayuda a los rebeldes norteamericanos. Abandona temporalmente el ejército y recorre el Virreinato de Nueva España para estudiar las posibilidades curativas de dos plantas: el agave y la begonia que los chamanes utilizan para curar enfermedades venéreas. En Méjico comienza a utilizar en los hospitales su terapia a base de agave y begonia pero sin los elementos mágicos que incluían los chamanes. Meses después regresa a España cargado de 1000 kilos agave y 345 de begonia además de plantas americanas vivas para el jardín botánico de Madrid.

En los primeros años del siglo XIX el rey Carlos IV, quién padece en su propia familia las secuelas de la viruela, decide armar una expedición para frenar las epidemias que están arrasando la población indígena del Nuevo Mundo y las Filipinas ¿Quién mejor que el Doctor Balmis para dirigir la expedición, tanto por su profundo conocimiento de aquellas tierras y sus gentes como por su dilatada practica en la técnica de vacunación de Jenner?


Ya conocemos a los dos héroes principales, no los únicos, de una de las gestas humanitarias más grandiosas de la historia de la humanidad como fue La Real Expedición Filantrópica de la Vacuna.

Gonzalo FC.L


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